Hoy nos visita la fotógrafa Delfina Carmona que conversa con nuestra colaboradora la también fotógrafa Mora Dorrego:
MD.- Primero que nada Delfina, me gustaría decir cuánto me gusta tu trabajo y quiero agradecerte por tomarte el tiempo para esta entrevista. Comencemos por el principio y contanos un poco sobre vos. ¿Como descubriste la fotografía?
DC.- De muy pequeña siempre estuve relacionada con el arte y sus diferentes formas de expresión. Estudiaba teatro, música, literatura, expresión corporal y pasé una adolescencia rodeada de libros y sumergida en películas. De estas últimas siempre me maravilló la dirección de arte, la posibilidad de crear escenarios y la dirección de fotografía. Entonces me di cuenta que eso era algo algo que quería probar y hacer, inventar escenarios y capturarlos de alguna manera. Ahí surgió mi romance con la imagen y la fotografía.
MD.- ¿Te acordas la primera vez que tuviste una cámara en tus manos? ¿Recordas qué cámara era esa?
DC.- Me acuerdo que mi primer novio tenía una cámara analógica pero no puedo recordar el modelo. Un día la tomé prestada, me anoté en un curso de fotografía en un centro cultural de mi ciudad y esa fue la primera cámara real que utilicé. En ese momento me apasionaba la fotografía en blanco y negro, me parecía que tenía un carácter más artístico e intrigante que la foto a color, que me resultaba más cotidiana, casi como de álbum familiar (Hoy en día creo que casi no concibo otra fotografía que no sea a color jaja). En ese entonces compraba rollos y salía a caminar por diferentes calles, haciendo mis ejercicios del curso, retratando la vida urbana, los personajes cotidianos que me cruzaba, la arquitectura, etc.
MD.- ¿Cómo es tu proceso creativo cuando haces una campaña para una marca, por ejemplo? ¿Qué te inspira?
DC.- En el caso del trabajo con marcas puntualmente siempre trato de empaparme un poco del universo particular de cada una de ellas, entender su mensaje; y a su vez siempre tengo muy en claro que también quiero dejar mi propio sello en cada trabajo y cosa que hago. Hoy en día puedo decir que muchos de mis clientes me buscan a partir de lo que hago y para trabajar en línea con mi propia estética y es muy raro que me pidan algo completamente ajeno a mi manera de crear. Sí considero muy importante que las marcas con las que me relaciono compartan de alguna manera ciertos valores que considero esenciales hoy en día y trato de pulirme cada vez más y ser selectiva con mis clientes (a veces no es fácil y el trabajo siempre es trabajo incluso aunque a veces no te guste) pero es importante para mí poder establecer un nexo creativo con ellos.
MD.- Para muchos que están comenzando en el mundo de la fotografía es difícil dar el salto de ‘saco fotos por hobby’ a trabajar de esto ¿Como fue tu experiencia? ¿Cómo empezaste a trabajar como fotógrafa?
DC.- Yo creo que el salto se vuelve algo muy difícil cuando lo consideramos como tal, como un salto al vacío. Es decir, una meta a la cual queremos arribar y nos parece inalcanzable porque estamos acostumbrados a querer y saciar todas nuestras necesidades ya mismo. Los procesos siempre son largos, siempre hay que trabajar mucho, equivocarse, aprender, intentar, buscar. Podría decirte que hoy en día siento que mi proceso de sacar fotos por hobby a convertirse en una profesión fue algo que se fue dando naturalmente a lo largo de muchos años de trabajo y crecimiento personal, con esfuerzo y paciencia. Con altibajos, con momentos maravillosos y otros no tanto, como todo en la vida.
MD.- Tu trabajo tiene una impronta propia, cuando vemos una imagen tuya, al menos a mi me pasa, me doy cuenta que la hizo Delfina Carmona. ¿Como lograste llevar a tener tu propio estilo?
DC.- Continuando casi con la respuesta anterior, creo que es algo que se fue dando solo, a partir de ir haciendo las cosas que a mi me gustaba y necesitaba hacer. Soy una enamorada de la luz natural, de la luz del sol, de las sombras que se proyectan en una pared, de cómo interactúan los colores entre sí, de las formas, los objetos, los espacios. Me gusta mucho partir de un concepto muy simple y minimalista y desde ahí intentar crear algo hermoso, que impacte visualmente y penetre en las sensaciones y el imaginario de quien lo observa. Me siento cómoda trabajando con mi propia imagen, con el autorretrato como forma de contar y decir cosas que me pasan o cosas que se me ocurren, de inventar situaciones surrealistas, de generar un velo de misterio.
MD.- Tu estilo tiene mucho que ver con la luz natural ¿Te sentís igual de cómoda en un estudio? ¿Alguna vez eso fue un impedimento para conseguir trabajos o todo lo contrario?
DC.- Sí, me siento bastante cómoda trabajando en estudio si tengo que hacerlo por un trabajo puntual, pero quizás no es lo que más me apasiona! A lo mejor el concepto “estudio” no se ve tan reflejado en mi trabajo, que suele ser mucho más natural o espontáneo y yo creo que justamente muchos clientes me buscan por tener un estilo diferente muy marcado y porque hoy en día las propuestas cambiaron mucho y hay una apertura creativa mucho más grande que en el pasado, se buscan otras cosas y las posibilidades de mostrarlo son infinitas. Estudio además es una palabra muy amplia, puede ser cualquier espacio, cualquier locación en la que trabajemos y si tengo que resolver algún proyecto en un estudio tradicional con flashes, sinfín, etc; lo hago y son experiencias diferentes y muy gratificantes en otros sentidos también. De hecho, me gusta mucho mezclar luces en algunas imágenes e incluso trabajar con filtros de colores en fotografía nocturna. Es otra faceta que vengo desarrollando hace tiempo y me gustan mucho los resultados que vengo obteniendo.
MD.- ¿Tenes una foto favorita tuya? ¿Cuál es la historia detrás de eso?
DC.- Uf! Qué difícil esta pregunta, en general me cuesta hacer selecciones sobre mi propio trabajo. Creo que no tengo ninguna foto favorita! Tengo muchas fotos que me gustan mucho por diferentes motivos y que son especiales para mí. Quizás tengo mucho cariño con las fotos que tomo cuando estoy de viaje, porque encierran la magia de la anécdota y disparan el recuerdo. Muchas fotos que tomé en los últimos dos años de viajes que hice por Europa están teñidos de vivencias y por eso hoy las veo y las siento especiales.
MD.- ¿Cuáles son tus cuenta/s favorita/s de Instagram?
DC.- Me gustan mucho las revistas digitales en IG que comparten todos los días el trabajo de distintos artistas contemporáneos. Creo que seguir varias de esas cuentas es una buena forma de conocer personas muy diferentes y empaparse de inspiración.Tengo una laaarga lista de preferidas: @artclassified, @coyculture, @magnificomagazine, @dreamermagazine, @fisheyelemag, @somewheremagazine, @gominimalmag, @thosedailyattitudes, @etczine, @realismagazine, @theapricotmagazine, @oneearthmagazine, @uncertainmag, @c_l_o, @nightwalkermagazine, @myartmagazine, @indiependentmag, @collateral.photo, @fubiz, @ignant
MD.- ¿Qué es lo mejor y lo peor de ser fotógrafo?
DC.- Ser tu propio jefe! En el buen sentido no tenes que trabajar para nadie más y podes manejar tus propios horarios y agenda y en el sentido malo hay que ser muy organizado y moverse mucho para conseguir lo que se busca.
MD.-En tu opinión, ¿qué hace a un gran fotógrafo?
DC.- Tener muchas ganas de crear, la búsqueda y la pasión constante son esenciales. Animarse a probar una y otra vez. Intentar mostrarnos con total sinceridad y entrega como artistas en cada foto realizada, sea una foto que se saca por propio placer o por encargo. La posibilidad de plasmar la propia visión, nuestros sentimientos o pensamientos en cada clic que hagamos, eso creo que hace la diferencia. No estar comparándose con los demás, hacer el propio proceso con amor y paciencia también hace que no caigamos en lugares comunes. Creo que son valores importantes para cualquier profesión artística en general! No dejar que alguien más te diga que no podes hacer algo: hacer lo que quieras hacer, siempre. Y jugarse a fondo.
MD.- Y por último, ¿qué consejo le darías a los fotógrafos que están comenzando?
DC.- Que se sientan libres de explorar su propio camino, que en lugar de estar pendientes de lo que hacen los demás, se enfoquen en la propia búsqueda individual y que no se dejen llevar por las opiniones de otros. Que no tengan miedo de probar una y otra vez, de fracasar, de volver a intentar. Que todo llega si nos esforzamos y que es importante disfrutar el recorrido! Hacer y hacer para ir armando el portfolio personal de a poco, con imágenes que hablen de nosotros y nos hagan sentir cómodos, nos identifiquen
