Paula, Belen, Marina and I haven’t been together for a really long time. We grew up as one and probably, most of the time we spent. happened in rooms. Changing and becoming more complex, having all the typical adolescent problems, being multiple, mutating. Then we all started traveling, went to uni, and hopelessly attempted to mature. The other day, together during the lockdown, Belen came with a bag full of sunflower seeds and a coke, and I was on the phone with Tomas but hanged up to take pictures of her, and then Marina joined and then we got Paula to hung up on the phone too and come quickly because there was still some light left and I, for the first time, took pictures of them. And a few days later we were revising the notebooks that we used to write in to talk about out experiences of growing up, and emails we used to send us talking about friends and boys (unfortunately already spending a lot of time thinking about boys) and weirdly recognizing ourselves, our contemporary personalities, in those left behind, and it all somehow made a lot of sense.
Paula, Belén, Marina y yo no hemos estado juntas desde hace mucho tiempo. Crecimos unidas y probablemente, la mayoría del tiempo, lo pasamos en habitaciones. Cambiando y siendo cada vez más complejas, teniendo todos los problemas típicos de la adolescencia, siendo múltiples, mutantes. Entonces todas empezamos a viajar, ir a la universalidad, y desesperanzadas intentamos madurar. El otro día, juntas durante la cuarentena, Belen vino con una bolsa de pipas y una coca cola. Yo estaba al teléfono con Tomás pero colgué rápido para hacerle fotos, y entonces Marina se unió y conseguimos que Paula colgara también y que llegase rápido porque aun había un poco de luz y,
por primera vez en mi vida, les hice fotos. Y unos dias después estábamos revisando cuadernos en los que solíamos escribir sobre nuestras experiencias de crecer, y los emails que nos solíamos mandar hablando de amigas y chicos (por desgraciaya pasábamos mucho tiempo pensando en chicos) y extrañamente nos reconocíamos, a nuestras personalidades actuales, en aquellas dejadas atrás, y de alguna manera todo cobraba mucho sentido.
Modelos: Belen de Orbe, Marina de Orbe y Paula de Orbe
